En el marco de la Feria Grande de la
Montaña en La Grita
Después de un largo paréntesis, mucho más maduro como persona y cómo torero, vuelve a vestir de luces Otto Rodríguez en La Grita. Foto: Federico Montes |
RUBÉN DARÍO
VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
A poco que el lio del toro va estructurando las
ferias de mediados y tercio final de año, vemos que dichas combinaciones nos
traen sorpresas agradables, como el hecho de ver que este año se hayan
recuperado citas feriales como las tachirenses de La Grita y Táriba por
ejemplo, mirando de soslayo lo que ya por septiembre sería la tradicional de
Tovar. A todo esto se encuentra pendiente el aficionado de estos lares, con la
ilusión nunca perdida que arenas como Valencia, Maracay o Maracaibo algún día
no muy lejano, también podamos tener en agenda como no hace muchos años contábamos
en el calendario.
A todas estas, un torero conocido, que este año se
encuentra en sus “bodas de plata, que
se hiciera en la gran plaza que fue la de Valencia, con la borla de matador de
toros, como es el valenciano Otto Rodríguez Lemus, ha anunciado que vuelve de
forma puntual a vestir “el chispeante”,
es decir, de luces, tras un paréntesis de varios años, donde ha madurado como
hombre y como torero, donde la visión ya no es la misma de aquellos años donde
la vorágine de los triunfos muchas veces obligaba atenazar formas y maneras.
Todo vino luego del festival que el pasado 25 de
marzo tuvo lugar en el parque “Carlos Raúl Villanueva” de Maracay, donde literalmente
reapareciera en público de manera imprevista, en la que destapó ese halo de
toreo caro que siempre ha atesorado Otto, esto, ante una noble vaquilla de
Campolargo, de la que le dio ocasión para comprobarse él mismo de que aún hay
algo que decir como torero, de cara al aficionado.
Pues lo ha meditado Otto y finalmente ha decidido
que en el año de sus 25 aniversarios de doctorado, algo había que hacer, y qué
mejor que en una feria de atractivos y novedosos nombres, el que de nuevo se le
vea en el ruedo, ante el de los cuatro años y cuernos, tal y como confirma este
pasado miércoles a los medios de comunicación.
Como ya hemos señalado, la Feria Grande de la
Montaña, como le han denominado, a lo que siempre se le llamó la del Santo
Cristo de La Grita (por razones personales del padre de dicha localidad), se
compone de dos corridas de toros, un festejo cómico-taurino y un festival de
peñas taurinas, cuyos festejos mayores serían las fechas del 13 y 20 de agosto
(esta ultimo coincidiendo con la corrida de cierre en Táriba), donde tal y como
confirma el conocido aficionado taurino León Sanz (responsable de la Empresa
Taurina, TAUROUNION) de espadas venezolanos aparte de Otto Rodríguez estarían contratados
Manuel Medina "El Rubi", César Vanegas y Fabio Castañeda junto a los
coletas aztecas Sergio Garza y Daniel Ayala (ambos debutantes en ruedos
venezolanos), a falta de posiblemente un solo espada por anunciar y de esta
manera dar a conocer carteles.
TEMPORADA
EN LAS VENTAS - Ruiz Muñoz y aquel retrato de Curro: "La faena de Sevilla
me ha abierto las puertas de la confirmación en Madrid"
El
sobrino nieto del Faraón torea este domingo en Madrid con José Garrido y Álvaro
Lorenzo, ante las cámaras de Mundotoro TV en punto de las 12:30 del mediodía
(hora de Venezuela)
Las corridas del verano, tal y como reseña el
periodista Gonzalo Izquierdo Bienvenida en el diario El Mundo de Madrid,
empiezan este domingo con un atractivo cartel de jóvenes (ninguno alcanza los
30 años de edad) de dispar recorrido. José Garrido y Álvaro Lorenzo cayeron
heridos en San Isidro. Su rodada juventud confirmará a la sorpresa de la Feria
de Abril, Ruiz Muñoz. El matador gaditano, sobrino nieto de Curro Romero,
dibujó una personal obra de desmayado trazo a un noble pupilo de Fermín
Bohórquez.
Reverdeció con su gracia aquellos laureles de su
prometedor inicio como novillero -con la cumbre de la faena de Santander- para
posicionarse de nuevo ahora en el escalafón superior. Tocó la puerta de Madrid
a la que llega para estoquear toros de Las Ramblas (que sustituyen a los de Los
Bayones por un problema sanitario) y tres de El Vellosino.
"Es una fecha muy esperada para mí. Una
oportunidad que afronto con ilusión. Mi ilusión es que la gente pueda ver lo
que siento delante del toro. Intento hacer lo que siento. Madrid está en la
mente de todos los toreros cuando entrenamos, cuando nos mentalizamos. Es el
mejor escaparate para desarrolla el toreo que uno lleva dentro", asegura
Ruiz Muñoz con fragilidad aunque convencido.
El brindis a Curro, la emoción de la ovación de la
Maestranza al Faraón, chispazos imborrables de la faena y la vuelta al ruedo
tras la insensibilidad presidencial. Sevilla. "La tarde fue muy importante
porque me dio la posibilidad de seguir caminando en la profesión. Me ratificó
en el toreo que busco, me ha ayudado a evolucionar y ha sido fuente de ilusión
para seguir creyendo. Aquella tarde me ha abierto las puertas a la confirmación
que llega este domingo".
Trenzará el paseíllo con toreros con los que
compartió novilladas hace un puñado de temporadas. Cada uno ha madurado de una
forma. Cada uno ha tenido un tempo distinto. Ruiz Muñoz tomó la alternativa en
2021, en Requena (Valencia), con Manzanares y Roca Rey. Así habla de sus
compañeros de cartel que le arroparán en la confirmación: "He coincidido
bastante con ellos, especialmente en la época que éramos novilleros con
picadores. Que un día como este, tan importante y al mismo tiempo tan bonito
para mí, pueda torear con dos toreros de tanto mérito es un privilegio para
mí".
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