Lo
poquito que hay está comprometido
RUBEN DARIO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
A poco que en el curso de esta semana termine de
concretarse la tragi-comedia que vive la Plaza de Toros de Mérida, bien es
cierto que el mundo del toro no se paraliza, y sigue su curso, cada vez más
menguado, pero luchando por los avatares propios y externos que la mantienen en
el tapete del interés del taurino y aficionado.
Elemento de suma importancia lo es el toro de
lidia, vaya que es el más importante y el que menos se le toma en cuenta a la
hora de organizar un evento de la magnitud de una corrida de toros, que por
algo es el Rey de la Fiesta.




